Un libro es un jardín de bolsillo y Paloma Hidalgo guarda en ellos palabras cargadas de sentimiento, historias que te tocan el corazón o hacen volar la imaginación. Realidad y fantasía se cuelan entre sus letras con naturalidad y aparente sencillez que te envuelve y te hace disfrutar, vivir o sufrir con sus personajes a los que te presenta con tanta ternura que no pueden dejarte indiferentes.
De la mano de Paloma Hidalgo os dejo comiendo las uvas con el abuelo mientras os cuenta la historia del origen de las estrellas fugaces. Además, os animo a visitar su jardín para saber el final de las palabras y descubrir otros grances microrrelatos.
EL ABUELO
Una, por llegar hasta aquí; dos, por mi mujer dónde quiera que esté; tres, a ver si mis hijos recuerdan que aún existo y me vienen a ver; cuatro, por mis compañeros de residencia, sobre todo por Eutimia; cinco, por las cosquillas que me hacen los recuerdos; seis, que me atraganto; siete, esta me la trago entera; ocho, por un futuro para mis nietos; nueve; para vencer los miedos; diez, ¿Qué hacemos a las doce en el salón?; once, suenan las campanas de la iglesia; doce, vámonos a la cama que a las seis me levanto a ordeñar las vacas.
EL ORIGEN DE LAS ESTRELLAS FUGACES
El caballo relinchó, encabritado y envuelto en la nube de polvo que le rodeaba parecía recién llegado del infierno, sin embargo ella no movió ni un solo músculo de su cuerpo. Las sedas de su vestido ondearon como banderas al viento mientras la corona se deslizaba de su real cabeza. El animal la miró a los ojos, el bálsamo que encontró en su mirada calmó su furia; ella se acercó y tras recoger la corona la colocó sobre la cabeza del pura sangre que rodilla en tierra rendía pleitesía a la princesa.
Dice la leyenda que no hubo mago en todo el reino capaz de romper el hechizo que la convirtió en humana y que una noche de luna llena los niños de la aldea les vieron surcar los cielos, ella aferrada a sus crines, en dirección a las estrellas, entre las que aún siguen buscando un lugar.
PALABRAS
Las palabras más bonitas, las más complicadas, las que expresan mejor lo que siento me las ha enseñado ella; las más apropiadas para consolar a otros, las mejores para animar a quien lo necesita, las precisas para ser educado y las idóneas para demostrar que algo no me gusta, palabras pequeñas, enormes, divertidas y serias; palabras dulces como sus ojos de caramelo, amargas como las despedidas, palabras traviesas como cachorros de gato y sencillas como las gotas de lluvia. A sus doce años ella llena el hueco que mamá dejó hasta hacerlo rebosar. Con paciencia cada tarde en la cocina, al calor de la lumbre mi hermana me descubre la magia de las palabras, las hace crecer y volar enganchadas al vapor de la cazuela en que prepara la cena para todos, las disfraza para asistir al baile de mis sentidos con maestría, ella las hace bailar. (seguir leyendo)
De la mano de Paloma Hidalgo os dejo comiendo las uvas con el abuelo mientras os cuenta la historia del origen de las estrellas fugaces. Además, os animo a visitar su jardín para saber el final de las palabras y descubrir otros grances microrrelatos.
UN LIBRO ES UN JARDÍN DE BOLSILLO - Paloma Hidalgo |
EL ABUELO
Una, por llegar hasta aquí; dos, por mi mujer dónde quiera que esté; tres, a ver si mis hijos recuerdan que aún existo y me vienen a ver; cuatro, por mis compañeros de residencia, sobre todo por Eutimia; cinco, por las cosquillas que me hacen los recuerdos; seis, que me atraganto; siete, esta me la trago entera; ocho, por un futuro para mis nietos; nueve; para vencer los miedos; diez, ¿Qué hacemos a las doce en el salón?; once, suenan las campanas de la iglesia; doce, vámonos a la cama que a las seis me levanto a ordeñar las vacas.
EL ORIGEN DE LAS ESTRELLAS FUGACES
El caballo relinchó, encabritado y envuelto en la nube de polvo que le rodeaba parecía recién llegado del infierno, sin embargo ella no movió ni un solo músculo de su cuerpo. Las sedas de su vestido ondearon como banderas al viento mientras la corona se deslizaba de su real cabeza. El animal la miró a los ojos, el bálsamo que encontró en su mirada calmó su furia; ella se acercó y tras recoger la corona la colocó sobre la cabeza del pura sangre que rodilla en tierra rendía pleitesía a la princesa.
Dice la leyenda que no hubo mago en todo el reino capaz de romper el hechizo que la convirtió en humana y que una noche de luna llena los niños de la aldea les vieron surcar los cielos, ella aferrada a sus crines, en dirección a las estrellas, entre las que aún siguen buscando un lugar.
PALABRAS
Las palabras más bonitas, las más complicadas, las que expresan mejor lo que siento me las ha enseñado ella; las más apropiadas para consolar a otros, las mejores para animar a quien lo necesita, las precisas para ser educado y las idóneas para demostrar que algo no me gusta, palabras pequeñas, enormes, divertidas y serias; palabras dulces como sus ojos de caramelo, amargas como las despedidas, palabras traviesas como cachorros de gato y sencillas como las gotas de lluvia. A sus doce años ella llena el hueco que mamá dejó hasta hacerlo rebosar. Con paciencia cada tarde en la cocina, al calor de la lumbre mi hermana me descubre la magia de las palabras, las hace crecer y volar enganchadas al vapor de la cazuela en que prepara la cena para todos, las disfraza para asistir al baile de mis sentidos con maestría, ella las hace bailar. (seguir leyendo)
Maravilloso homenaje Puck para Paloma. Gracias por regalarnos esos tres estupendos micros. Me quedo con el del abuelo, me ha encantado, me parece magnífico. Enchorabuena a ambas. Un beso.
ResponderEliminarMuy buenos relatos los que aquí pones y los que he leído de ella. Como siempre, sueles dar en el clavo con tus homenajes: en forma y fondo.
ResponderEliminarUn beso.
Conozco su blog y sé lo bien que escribe.
ResponderEliminarAbsolutamente recomendable.
Saludos.
Puck, como siempre tus homenajes tan generosos son delicatessen. Paloma, es una escritora con mucho sentimiento y muy original en sus relatos. Que sabe guiarnos por historias de intriga, miedo, amor y ternura. Además, muchas veces acompaña sus relatos con acuarelas que ella misma hace, es una artista.
ResponderEliminarUn abrazo a las dos.
Paloma es una microrrelatista formidable, que está en mi circuito de lecturas obligadas y recomendadas.
ResponderEliminarImagino lo feliz que le hará este reconocimiento que le dispensas, Puck.
Reconocimiento que, por otro lado, habla de ti y de tau generosidad.
Un abrazo.
Qué buena decisión has tomado, Puck! Paloma es una gran microrrelatista. Imagino lo difícil que habrá sido elegir entre tan variado material.
ResponderEliminarGracias por este generoso regalo con el que nos alegrás cada domingo.
Paloma, mi cariño y admiración
Como diría Lola, besos a pares.
Es un placer ver a Paloma en los jardines y desde luego visitarla en su casa.
ResponderEliminarBesos desde el aire a ambas.
Puck,MUCHÍSIMAS GRACIAS!!
ResponderEliminarHa sido un sorpresón encontrarme con ésto, no sé ni qué decir además de que te lo agradezco mucho de verdad y de que me he sentido feliz. Mil gracias.
Mar, CDG, TORO, Nicolás, Pedro, Patricia, gracias por vuestras palabras, jo, sigo emocionada.
Abrazos y besos para todos. Y un "saludillo" especial para tí Puck.
Puck, eres generosa y elegante por la manera y las palabras que despliegas para hablarnos de tus invitados. Entiendo la emoción de Paloma.
ResponderEliminarBesitos
De allí vengo. Un buen jardín para visitar con calma.
ResponderEliminarBuena entrada, ranita.
Besos a la anfitriona y a la visitante.
Como no la conocía, voy a hacer una visita.
ResponderEliminarBesos
Paloma, me encanta tener un trocito de tu jardín dentro de mis jardines :-)
ResponderEliminarGracias a todos por vuestra visita y vuestras palabras que saltan desde estos jardines al de Paloma
saludillos