martes, 28 de febrero de 2012

El legado del general

El abogado de la famlia nos reunió a todos en el salón del oeste. Cuando abrió el cartapacio en el que guardaba el testamento del abuelo, un sudor frío me recorrió la espalda. Estaban en juego la mansión de la Costa Brava y la de Túnez, con camellos incluidos. La verdad es que, aunque me sabía su nieto más querido, me hubiera conformado con el refugio del lago al que se accede por una carretera llena de socavones. Nunca pensé que me dejara su posesión más preciada. Una colección de soldaditos de plomo con los que organizó la estrategia de su primera gran batalla.


31 comentarios:

  1. Puck, gracioso microrrelato en el que has utilizado extraordinariamente las palabras requeridas. Lo de la casa de Túnez con camellos, genial y la sorpresa final con los soldaditos,
    igual.

    El tema de las herencias... nunca me ha gustado, por eso yo no pienso dejar nada, como canta Sabina.

    Me gustó.

    Un abrazo grande.

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    1. Nicolás, gracias, yo también soy muy asabinada en esto jeje

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  2. Con esos soldados, el/la protagonista de tu relato podrá empezar también nuevas batallas para perderlas y ganarlas. Muy original, Puck.
    Pienso como Nicolás y Joaquín: yo no pienso dejar nada, savlo lo que quieran recordar de mí, y eso que tuve cientos de noches.
    Un beso

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    1. CDG, los recuerdos son todavía mejor que los soldaditos de plomo

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  3. Bonita herencia. Si el finado se la dejo con todo el cariño, es que realmente alguien le hizo ver que eso le podía gustar, ese nieto tan preferido, posiblemente.
    Es como si... se hubiese hecho justicia o algo así.

    Este heredero tuvo que contener la perplejidad, quizás; los otros la risa y las ganas de ponerse a saltar como cabras.

    Un beso, Luisa

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    1. Luisa, gracias, el valor que le dan los herederos lo dejo a la imaginación de cada cual jeje

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  4. El valor de las cosas es aquel que nosotros le damos. Me gustó mucho.

    Dos besos y un abrazo.

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  5. Me parece fantástico cómo has encajado las palabras en la amalgama de una prosa que compone un micro genial, Puck.

    Desconozco el resultado del certamen de los abogados, pero me sorprendería saber que este micro no ha sido seleccionado.

    Un abrazo,

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    1. Pedro, no lo seleccionaron, pero no importa. Me gusta jugar con las palabras jeje y me alegro que te guste el resultado

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  6. Bueno, está claro que el materialismo no era uno de sus valores. Muy bien, espero que te seleccionen. Lástima los camellos...

    Un saludo.

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    1. Citizen, así que tú querías los camellos eh? jeje

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  7. ¿ Y con semejante micro no te han seleccionado?, buah abogados quién los entiende!.

    Un beso

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    1. Ángeles, la selección es subjetiva, esta y todas, así se entiende jeje. bsts

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  8. Confirma lo que pienso. Esto de las selecciones son tan arbitrarias... Me gustó mucho como elaboraste el micro. El final, es una vuelta de tuerca muy esperanzadora.
    Saludos, mi amiga!

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    1. Bee, me gusta que veas esperanza en el micro

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  9. El General le dejó un recuerdo inolvidable.
    Se acordará de él toda su vida.

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    1. Toro, jeje, me encanta el doble sentido de tu comentario jajaja

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  10. Ese gran juego que haces con el valor de las cosas esconde una gran lucha que se lleva hoy en día. Sólo se valora lo ya valorado, nunca a lo que se tiene aprecio.

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    1. Adivín, valor y aprecio son dos cosas muy diferentes :-)

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  11. En un mundo cada vez más materialista se agradece un soplo de romanticismo. Bonito micro, Puck.

    Un beso.

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  12. No siempre lo que los demás valoran coincide con lo que nosotros valoramos...Hay cosas que no tienen precio.

    Besos desde el aire

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    1. Rosa, como el anuncio de VISA jeje. Un abrazo fuerte

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  13. Está claro que materialista no era. Me gusta este legado.

    Besitos

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  14. Si miras hoy miércoles el doodle de google te llevarás una sorpresa que te hará croar...

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  15. Qué bien que a veces el valor de las cosas sea el que deberían tener. Un micro de aplauso

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  16. Que el abuelo entendía lo importante queda claro, que el nieto lo entienda lo has dejado ene el aire. Me gusta.

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