A Nicolás, para que vaya conociendo a Sabina
Me sobran los motivos para escribir la canción más hermosa del mundo en esta ciudad, pongamos que hablo de Madrid, donde los niños se ríen de las enfermedades y, aunque te tomes pastillas para no soñar, ves cómo aprenden a jugar por jugar y te obligan a abandonar calle Melancolía. Cada sábado me bajo en Atocha para cogerle en brazos, verle reir y firmar un pacto entre caballeros: que los cuentos que le cuente acaben bien. Por eso, incluso en estos tiempos, en los que todavía quedan horas de hospital, me sirvo un whisky sin soda para brindar por las buenas noticias y cantar el rap del optimista mientras espero que suenen los primeros compases de la Orquesta del Titanic.
Bravo.
ResponderEliminarY punto en ja mayor.
Comparto contigo la admiración por el maestroSabina, Puck.
ResponderEliminarTengo la suerte de habérselo transmitido a misnhijos, con lo cual no discutimos a la hora de elegir música al viajar.
Has logrado una pieza estupenda. Un puzzle genial.
Un abrazo.
Puck, espectacular. Como has podido hilvanar en tan pocas líneas gran parte de los éxitos de Joaquín y Sin embargo, no perder la sensación de ser un relato de Princesa.
ResponderEliminarMe ha encantado este homenaje a Sabina y estoy seguro que a Nicolás le va a encantar. Ánimo, tocayo.
Un abrazo fuerte.
Nicolás, tu tocayo está hecho un campeón y nos va dando buenas noticias. Todavía le queda camino, pero va viento en popa a toda vela.
Eliminarbsts
Vengo del blog del Adivín Serafín después de leer ese espléndido relato tuyo donde los fantasmas se esconden en los cuadros y los cuadros se disfrazan de espejos... Me ha encantado. Y ahora me encuentro con este homenaje a Sabina... :)
ResponderEliminarTe confieso que las pocas veces que he estado en Madrid he ido como un loco a buscar el Parque del Retiro, porque como buen pueblerino que soy añoro enseguida los árboles y los espacios abiertos... Me asfixian tantas calles y tanto tráfico... Pero eso sí, escuchar como habla Sabina de los lugares que ama... siempre es un placer.
Un abrazo
Buen ejercicio de costura Puck, de la buena, con parches interactivos, a remiendos de Joaquín. Aún recuerdo el día que descubrí Atocha, era bien jovencito, y me dejé seducir.
ResponderEliminarSaludos.
Acabo de leer tu "Buhardilla" el nuevo inquilino no se ha asombrado...
ResponderEliminarMe asomo a tu jardín para darte la enhorabuena, había oído hablar de ti pero no te conocía, creo que me quedaré por aquí un ratico....
Besicos
Me encanta Sabina, también el blog de Adivín, aunque ya conocía tu espacio, ha venido bien el recuerdo del sitio.
ResponderEliminarSaludos
Te ha quedado una buena melodía a base de encajar canciones en el texto.
ResponderEliminar¡Viva Sabina! ¡Viva Puck! ¡Viva las ranas! :-)
ResponderEliminarUn beso.
Me ha encantado tu micro "La buhardilla", leído en el blog de Nel. De su mano llego hasta aquí y me encuentro con Joaquín Sabina, que tanto me gusta. Echo un vistazo a tu blog y me seduce, así que aquí me quedo. Te iré conociendo poco a poco.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Puck, te ha quedado un micro genial hilvanando lo mejor de Sabina, por el que comparto tu afición. La buhardilla en casa de Nel me ha gustado mucho. Enhorabuena, por ambos, y me ha encantado compartir espacio contigo. Un beso.
ResponderEliminarBien bordado Puck... una buena recopilación.
ResponderEliminarSeguro que a Nicolás le servirá de ayuda para descubrir un poeta urbano y un genio de la música.
Besitos mediterráneos.
Me encanta!, el relato y los niños que ríen, el jugar por jugar, la calle Melancolía, Madrid, Atocha, Sabina y sobre todo, sobre todo, los cientos que acaban bien!.
ResponderEliminarBesotes
Me encanta el micro que te has marcado a ritmo de las canciones de Sabina. Es una gozada.
ResponderEliminarBesitos
Quizá deberías mandárselo a Sabina, seguro que le gusta ver todo lo que inspiran sus canciones.
ResponderEliminarBesitos.
Gracias a todos por vuestra visita y vuestras palabras.
ResponderEliminarBienvenidos a los nuevos, estáis en vuestra casa, perdón, vuestros jardines, espero que os sintáis a gusto.
A todos, perdonad mi brevedad, voy sin tiempo para nada, pero os iré devolviendo las visitas con calma. Prometido.
Saludillos